Se trata de un partido sin margen al error para los jugadores peruanos porque de perder o empatar le estarán diciendo adiós al certamen en la Fase de Grupos, situación que no sucede desde 1995.
La oncena titular tendrá que salir con lo mejor de su repertorio para lograr el objetivo porque en el mismo instante que se inicia el cotejo no valen las palabras, solo el rendimiento y en ello la Bicolor está en debe, ya que hasta ahora le cuesta construir jugadas y su falencia más prominente está en la ofensiva, males que plasmó cuando empató (0-0) ante Chile y cayó (1-0) frente a Canadá por el Grupo A.